Abdala: segunda dosis de esperanza

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La segunda dosis del candidato vacunal Abdala llega a partir de este lunes a la población mayor de 60 años de los municipios de Matanzas, Cárdenas y Colón en un primer momento. Le seguirán el resto de los grupos mayores de 19 años.


Por segunda vez Abdala

Ramón Pacheco Zalazar pone su hombro por segunda vez para recibir Abdala como parte de la intervención sanitaria que desde el pasado 31 de mayo inició en la población mayor de 19 años de tres municipios de la provincia de Matanzas.

Este fotorreportero con más de 6 décadas de vida y otras tantas de trabajo expresa su satisfacción por concretar el sueño de recibir este candidato 100% cubano. «En el caso mío ya es la segunda dosis que recibo. Sinceramente la he pasdo muy bien, no me he sentido nada. También he contado con el apoyo de los médicos y los enfermeros y todos los que de una manera u otra han contribuido al desarrollo de esta vacuna y a que este consultorio lleve a cabo el proceso con calidad y efectividad.»

Las personas mayores de 60 años inician la segunda dosis desde este lunes. Le siguen los de 40 a 59 años y cierran el ciclo los mayores de 19. Abdala ha demostrado ser un candidato efectivo y seguro hasta el momento. Apenas si se registran eventos adversos, todos leves o moderados. El esquema incluye tres dosis cada 14 días.

Apoyo necesario

Entidades de la provincia apoyan el proceso en los más de 300 vacunatorios habilitados en los municipios de Cárdenas, Colón y la ciudad cabecera. Representantes de muchas empresas garantizan la permanencia de un transporte para trasladar pacientes en caso de reacciones adversas, además se encargan de la recogida del personal de salud y la búsqueda de la alimentación.

Eloy Evora Escobar, técnico de transporte de la Empresa Provincial de Mantenimiento y Construcción de Matanzas es una de las personas que permanece de guardia en uno de los consultorios médicos de la ciudad cabecera.

«Estamos aquí desde el amanecer y hasta que llegue el último paciente en la tarde. Mi función es apoyar con el transporte. Recogemos a la doctora en su casa todos los días, la traemos al vacunatorio y permanecemos al tanto por si tenemos que trasladar algún ancianito o cualquier otro paciente al policlínico por cualquier complicación.

También nos encargamos del traslado de la merienda y el almuerzo para garantizar la atención al personal que aquí trabaja. Desde antes de comenzar todo el proceso el 31de mayo estamos ayudando en todo lo necesario aquí, pintamos el local y aportamos un refrigerador, esencial para mantener la cadena de frío del candidato vacunal.»

Abdala continúa regalando esperanzas a los matanceros sin descuidar el cumplimiento de todos los protocolos y las medidas higiénicas – sanitarias para ganar  la batalla a la COVID 19 y estar saludables y seguros.