Paisaje campestre. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
La ciudad a veces nos absorbe con su cotidianidad; su andar feroz nos roba mucho más que tiempo y cuando alzamos la vista ya ha pasado otro año y nosotros, sin darnos cuenta, seguimos su ciclo como citadinos.
Sin embargo, hay un mundo más allá de la ciudad, un mundo lleno de colores y olores, donde la prisa no es bienvenida y entre verde, azul y flores pasa el tiempo más lento y los ojos se llenan de vida y paz.
A contra luz. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Con el ala rota, pero luchando. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Flores. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Mangos de los campos de Cuba. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Olor a campo. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
La magia de lo sencillo. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Cielo en el campo. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate
Fauna en los campos de Cuba. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate