Matanzas, 8 ene (ACN) Establecer un control minucioso de los focos activos de COVID-19 y la identificación de sospechosos constituyen premisas en las que trabaja Matanzas con el objetivo de detener la propagación de la enfermedad, según trascendió en el más reciente encuentro del Consejo de Defensa Provincial.

Fernando Acebo Figueroa, director de la Unidad Provincial de Higiene y Epidemiología, señaló que Matanzas se encuentra en una etapa complicada en el enfrentamiento a la COVID-19, con un aumento sustancial de casos que devienen en focos activos de imprescindible monitoreo.

Durante los últimos 15 días, el número de positivos por virus SARS-CoV-2 en el territorio asciende a 162, cifra que no cumple los indicadores establecidos por el país para la etapa de nueva normalidad, y por ello desde hace algunas jornadas la provincia se encuentra en la tercera fase de recuperación pos-COVID-19.

Acebo Figueroa puntualizó que aunque se trabaja arduamente en controlar los focos activos y la identificación de sospechosos, aún persisten personas que ocultan información sobre sus contactos, dificultando así el trabajo epidemiológico

El director de la Unidad Provincial de Higiene y Epidemiología insistió en el correcto cumplimiento de las medidas higiénico-sanitarias y la necesidad de aumentar el rigor en la imposición de multas y decretos leyes con el objetivo de frenar la propagación de la enfermedad.

Ailuj Casanova Barreto, directora provincial de Salud Pública, explicó que los municipios de Cárdenas y Matanzas presentan la mayor tasa de incidencia del virus, lo que demanda pesquisas más precisas y responsabilidad ciudadana.

La provincia de Matanzas presenta hasta la fecha un total de 937 casos positivos en SARS-CoV-2, de ellos 612 después de la etapa de nueva normalidad, con más de 86 mil pruebas aplicadas de reacción en cadena de la polimerasa (el conocido test PCR, por sus siglas en inglés).