Danzoneando TV: una reverencia a la cultura cubana desde Matanzas

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Todo lo que se aprecia en Danzoneando TV es patrimonial; desde el escenario donde se desarrolla la propuesta televisiva hasta la música que ofrece devienen guiños a la historia de nuestra identidad.

 

La cultura nacional, en su expresión más pura, distingue con elegancia cada emisión del programa, cuya segunda temporada inició en la noche del martes 4 de enero y se extenderá hasta el mes de junio.

 

Las locaciones seleccionadas, sitios representativos de Matanzas como el Museo Farmacéutico, la Ermita de Monserrate o el propio teatro Sauto, que sirve como set principal del espacio, reafirman el atino con que se pensó desde sus inicios.

 

Con invitados como Hayla María Mompié, la orquesta Aragón, Pedrito Calvo, Beatriz Márquez y Toques de Río (los dos últimos en sus primeras entregas en la pantalla chica), Danzoneando TV pretende acercar géneros como el danzón, el cha cha chá, el mambo y el danzonete a las familias cubanas durante diez emisiones, más una temporada ampliada de 16 capítulos, a cargo del canal Cubavisión, para completar 26.

 

Ethiel Failde explicó en entrevista a la periodista Jessica Acevedo Alfonso, del semanario matancero Girón, que “al intervenir Cubavisión como productor, ese financiamiento se traduce en un mayor despliegue tecnológico, escenográfico y de dirección de arte”.

 

Esto se hizo notar en las primeras entregas de la actual temporada en la que el colorido acorde a los presupuestos conceptuales, la estética juvenil pero sobria, una factura impecable desde el vestuario hasta la proyección de los participantes apoyada además en la belleza del neoclásico edificio, el uso intencionado de las luces para sugerir un ambiente íntimo y acogedor y una fotografía de excelencia, recrearon el material audiovisual.

 

A ello se añaden la amena conducción de Pedro Pablo Cruz, los aportes de la musicóloga María Victoria Oliver sobre el danzonete y el dramaturgo Ulises Rodríguez Febles sobre Dámaso Pérez Prado, así como el material publicado por la periodista Aylenis Díaz Izquierdo sobre el monumental teatro yumurino.

 

Si no fuera suficiente, las ya habituales presentaciones de la Failde, orquesta de jóvenes que el venidero mes de abril celebrará sus 10 años de creada, se enriquecieron con la calidad interpretativa de Beatriz Márquez, quien regaló a los televidentes su versión de Rompiendo la rutina, el primer danzonete, compuesto por Aniceto Díaz, y la pasión del grupo fusión Toques del Río.

 

Las actuaciones de Pánfilo, que brindó un toque humorístico a la primera emisión, y el circo dotaron de mayor variedad a un programa que, refieren los organizadores, “no se limitará a reflejar el movimiento danzonístico de Matanzas, sino que nos acercará a cómo se vive el baile nacional cubano en otras provincias (como fue el caso del reportaje relacionado con la Casa de la Guayabera en Santi Spíritus) y fuera de nuestras fronteras, en la patria adoptiva del género, México”.

 

Si la versión radial de Danzoneando, transmitida por Radio Taíno, la FM de Cuba, mereció el premio Caracol 2016 en dirección de programas, su segunda temporada televisiva augura tantos o más éxitos que en sus entregas anteriores.

 

Todo apunta hacia la promoción necesaria, atractiva y oportuna de nuestros géneros, desde la pequeña pantalla en horario estelar y en la red de redes (donde se defienden los ritmos autóctonos por este equipo de trabajo con sistematicidad, frescura e inteligencia). También se puede predecir que la calidad artística que sirve como apoyo a tan indispensables temas garantizará altos niveles de audiencia.

 

Danzoneando TV representa entonces una reverencia hermosa, bien construida desde lo visual hasta lo simbólico, fresca y prometedora a Miguel Failde en el año cuando se cumplirá el 170 aniversario de su nacimiento, a Matanzas y a algunos de los ritmos más auténticos de la música cubana.

 

Patrimonio, historia y cultura crecen con esta propuesta que bien merece, cada martes desde las 8:45 de la noche, buenas críticas y, especialmente, el aplauso agradecido de los televidentes.