Deseaba obsequiar a los matanceros con algo especial, por eso el maestro Iván Valiente escogió la Sinfonía número siete en la mayor, Opus 92, de Ludwig van Beethoven, para su presentación de la tarde de este sábado 27 de mayo en la Sala White de la ciudad yumurina.

En esta obra “llena de optimismo, de emociones, de claroscuros”, junto al Concierto para dos contrabajos y orquesta, Pasión Amorosa, de Giovanni Bottesini, puso bajo su batuta a la Orquesta Sinfónica de Matanzas como director invitado. 

“Siempre tuve en mente hacer la séptima de Beethoven porque se adecúa muy bien a los tiempos difíciles que estamos viviendo. Se puede sentir en ella la energía de este compositor, que ya está sordo, pero que resurge a través de la fe en su música. Es un canto a la vida desde el primero hasta el último movimiento».

En el caso del dúo de contrabajos, interpretado magistralmente por Indira Ramos Matalón y Anaylis Placeres Suárez, reconoce que la elección estuvo marcada por su cercanía a ese instrumento.

“Aunque solo tuvimos cuatro ensayos, aprovechamos ese poquito tiempo. Resulta increíble cómo se adaptaron a mi estilo. Soy muy expresivo, hago la música con las manos y ellos me han respondido muy bien, logramos ese ensamble.

“Estoy satisfecho con el resultado y le agradezco muchísimo a las secciones de la orquesta que estudiaron por su cuenta, que hicieron ensayos parciales. Si hubiera un trabajo sistemático, la Sinfónica volvería a ser lo que fue en algún momento, pero para eso se necesita apoyo, continuidad.

Sobre los desafíos de la música de concierto en nuestro país, asegura que hoy la gente emigra mucho, pero también que los instrumentistas tienen que buscar puestos de mejor remuneración. “Algunos llevan las dos cosas pero cuando estas chocan deben decidirse por la que les da el sustento. 

“Desgraciadamente en el mundo entero la cultura atraviesa un mal momento porque muchos estados se preocupan más de las cuestiones económicas o de hacer guerras, que de subvencionar el arte.

El maestro Iván Valiente contó que se encuentra próximo a lanzar un fonograma, en compañía del pianista matancero Alejandro Falcón, que llevará como título Clásico entre puentes. 

“Tiene el simbolismo de los puentes de la ciudad pero también otros elementos identificativos, incluso hay una suite alegórica a Matanzas que contiene zapateo, rumba, mambo. La obra de él es muy buena y se le aprecia mucho por acá, nos encantaría presentar el disco en el Sauto. 

“Si todo sale como esperamos, podremos llevarlo a los Premios Grammy 2024”.

(Fotos: Sergio Martínez)