Más allá de su legado como actriz y directora, Miriam Muñoz ha contribuido a la formación de varias generaciones de actores, por eso la Casa de la Memoria Escénica decidió homenajearla en el espacio Luz con un panel, dedicado a su labor pedagógica, la mañana de este lunes 29 de enero, fecha de su 77 cumpleaños.

Entre quienes abordaron el magisterio de esta destacada matancera, el joven Antony Bernal, su discípulo, habló sobre cómo ella ha sabido llevar un exitosa carrera y, a la vez, sus proyectos sociales que acercan la cultura a la gente.

“Le otorga mucha libertad creativa a sus alumnos, no solamente les da clase sino que los invita a que formen parte del repertorio del grupo, hace que se sientan actores, esto es algo que no pasa en la mayoría de los talleres de actuación del país. Icarón es una raíz dentro de la ciudad, de la que han florecido muchas otras propuestas”.

Por su parte, Sheila Catellanos, quien interpreta a Laura en la obra Autopsia del Paraíso, se refirió a la importancia que tiene el acompañamiento de una maestra con tanta experiencia. “Mirita te lleva de la mano a descubrir la profesión y a crecer dentro de ella. Su paciencia, su sabiduría es algo que recordaré siempre, donde quiera que me lleve la vida voy a tener que retornar a ella, a darle las gracias”.

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Cristian García contó sobre el proceso de montaje del monólogo Por si anochece: “Me toco conocer esa parte sensible de ella, de apoyar las causas más humanas, me narraba el dolor, la desesperanza, el rechazo hacia las personas con Sida y cómo, desde su labor de actriz, se vinculaba y ayudaba a todo el que la necesitara. Ella intenta dejar en sus alumnos esa sabiduría que la vida le ha dado”.

Este 29 de enero también se cumplieron 99 años del natalicio del dramaturgo y director Abelardo Estorino y por ello la Casa de la Memoria, de conjunto con la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí y el Consejo Provincial de las Artes Escénicas de Matanzas, entre otras instituciones, lanzó la convocatoria para celebrar el año próximo un coloquio dedicado al centenario del destacado intelectual unionense.

Bajo el título Cien Estorinos, el evento se realizará en la ciudad yumurina e incluirá exposiciones, muestra de documentales, presentaciones de libros, puestas de sus obras, lectura de ponencias y concluirá con una actividad de homenaje y la peregrinación a su tumba en Unión de Reyes.

Iramís, ganador del premio Calendario en Ensayo. Foto: cortesía del entrevistado.

Iramís no se calla. Habla y habla. Escribe y escribe. Creo que la palabra es su sustento. No solo me refiero a ese con el cual el hombre se gana el pan y la cebolla, sino al vital; es como si al dejar de expresarse los silencios se le acumularan y lo envenenaran de a poco, como palabras-balas que se quedan en la carne y, lentamente, nos saturan de plomo. 

Dicen que la ciudad se parece a su gente: a los que allí tienen su morada o la improvisan en asentamientos alejados del corazón de la urbe, a los transeúntes que la atraviesan cada día en rutinas laborales o descubriendo sus misterios, a los que aportan a su bullicio, a los que tienen como techo al cielo, a los que la defienden, a los que no la olvidan. Gente que entreteje historias y da vida a ese lugar que, con luces y sombras, pareciese inerte ante el tiempo.