Con el objetivo de incrementar y diversificar la producción de alimentos en el país, el fomento de los módulos pecuarios resulta una de las tareas del campesinado cubano.
Foto: Rigoberto León
En la finca Los Molinos, el campesino Armando Javier González Morales potencia la cría de conejos, gallinas, cerdos y otras especies animales.
En más de 3 caballerías de tierra el usufructuario ha creado todas las condiciones para el desarrollo animal. También potencia la siembra de moringa, king grass y otras plantas destinadas a la alimentación del ganado.
El campesino matancero aprovecha cada espacio de sus tierras y siembra cultivos varios. Esto le permite a Armando, sus trabajadores y familia el autoabastecimiento alimentario.
Foto: Rigoberto León
«Entre vacas y novillas tengo 76 animales. Yo le entrego diariamente al Estado 70 litros de leche, le acopio carneros y conejos. Recientemente hice también un contrato con 10 mil peces que puse en una de las piscinas naturales que tengo aquí en la finca. Además quiero venderle las producciones de huevos cuando empiecen a poner las gallinas», expresó el usufructuario.
El amor por los animales, los deseos de ver germinar la tierra y la autogestión de recursos, hacen de la finca Los Molinos, además de un lugar paradisiaco, un espacio de referencia dentro de los campos matanceros.