Según reveló la directora general de la Oficina Cubana de Propiedad Industrial, María de los Ángeles Sánchez, se trata de un reconocimiento a los científicos por sus aportes al desarrollo nacional económico y tecnológico.
El Programa de Medallas de Oro de la OMPI se estableció en 1979 con el propósito de estimular la actividad innovadora en todo el mundo, en particular en los países en desarrollo, y sirve para atraer e incrementar el reconocimiento público de los inventores y de su trabajo.
Hasta la fecha, Cuba es merecedor de una decena de estos agasajos por la obtención de productos como el medicamento Heberprot-P, del Centro de Ingeniería Genética y de Biotecnología (CIGB), y la invención titulada Anticuerpos monoclonales antiCD6 para el tratamiento y diagnóstico de la psoriasis, del Centro de Inmunología Molecular.
La primera de estas fue recibida en 1989 por el Instituto Finlay de Vacunas (IFV) por el inmunógeno contra el Meningococo (Neisseria Meningitidis) del grupo B, y en 1999 le siguió el Policosanol ó PPG, fármaco de múltiples usos, del Centro Nacional de Investigaciones Científicas.
- Texto y Fotos por Agencia Prensa Latina.