Día Internacional de la Juventud: Protagonista de todos los tiempos

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Zona Industrial de Matanzas

No existe una sola batalla de nuestro proceso revolucionario en la que la juventud no haya sido actor principal. Así ocurrió en el Moncada, en la Sierra Maestra, la Campaña de Alfabetización y la lucha contra bandidos.

La participación en misiones internacionalistas y la defensa palmo a palmo de la Isla por aire, mar y tierra también constituyen muestras fehacientes de su protagonismo.  En todos los frentes, incluidos los de importancia vital, se les puede encontrar: en las industrias básica, alimentaria y ligera; agricultura, Salud y Educación, turismo, transporte…

De ahí que les corresponda asumir la responsabilidad de continuar el trayecto y garantizar el futuro de Cuba. No es para nada tarea fácil; significa un difícil desafío en medio de una época convulsa, inmersa en una profunda crisis mundial, donde la guerra y el terror se hacen comunes e imperan los instintos egoístas del ser humano.

Pero, algunas cualidades siempre les han caracterizado: valentía, perseverancia y deseos de mostrar cuánto pueden hacer. Eso se ha evidenciado en complejas batallas que ha tenido que enfrentar nuestro pueblo, como la covid-19 y más reciente, el incendio de enormes proporciones en la zona de supertanqueros en Matanzas.

Jóvenes voluntarios: desde la ciudad se apoya a los héroes de la juventud
Jóvenes voluntarios: desde la ciudad se apoya a los héroes

Por eso, hoy —fecha en que desde 1999 se celebra el Día Internacional de la Juventud—, mientras otros países se estremecen por las luchas del estudiantado contra las injusticias, ellos tienen motivos para continuar consolidando sus conquistas.

Pese a los intentos del imperio por desvirtuarlos, permanecen en la vanguardia y lo hacen con su aporte diario en la productividad, la eficiencia y el cambio de mentalidades acorde con los tiempos actuales.

Con su quehacer cotidiano dan plena vigencia a las palabras expresadas por el Che en 1965: “La arcilla fundamental de nuestra obra es la juventud; en ella depositamos nuestra esperanza y la preparamos para tomar de nuestras manos las banderas”.

También a las de nuestras Comandante en Jefe en 1962 cuando dijo: “Creer en los jóvenes es ver en ellos además de entusiasmo, capacidad; además de energía, responsabilidad; además de juventud, ¡pureza, heroísmo, carácter, voluntad, amor a la patria, fe en la patria!, ¡amor a la Revolución, fe en la Revolución, confianza en sí mismos!, convicción profunda de que la juventud puede, de que la juventud es capaz, convicción profunda de que sobre los hombros de la juventud se pueden depositar grandes tareas”.