El Team Matanzas, o la Furia Roja, como lo nombramos desde su aparición en la Primera Edición de la Liga Nacional de Futsal, dejó mucho que desear el pasado año aunque venció por puntos a Villa Clara y Mayabeque y clasificó a la segunda fase.

Recordemos que Matanzas hacía alrededor de ocho años no presentaba un claustro o equipo de futsal, problema que abrió las mentes de profesionales en la Educación Física y el Deporte, como el profesor Ángel Sánchez Zamora.

Con la formación del equipo vieron la necesidad de incluir ilustres presencias en ese deporte y fue cuando apareció Eduardo Morales, alias Angola, el número 5 de Cuba.

Angola tomó las riendas de ese primer equipo y los convirtió en un engranaje fuerte para enfrentar lo nunca antes visto por esos muchachos sin experiencia. Dejó en cada uno la lección de que, si llegaron lejos en su primer campeonato, en los venideros podrían llegar méritos aún más grandes.

Y así fue: desde el inicio de la Segunda Edición del torneo, destacaron los antiguos y nuevos jugadores, vinculados a la plantilla, dejando a los aficionados con la boca abierta.

Esta vez con Angola de director técnico, las cosas se comportaron diferente. Se veía venir un equipo doblemente reforzado, con ganas de más victorias y menos derrotas. Por tanto, la mano dura desde las captaciones de nuevos jugadores y la eliminación de otros no ha dejado cabida para errores.

El equipo de Matanzas, aunque posee jugadores jóvenes y novatos, pone en estos momentos el fútbol de sala en la cima de los deportes con mejores resultados en la provincia.

Con un total de 59 goles a su favor y 31 en contra, trajeron a casa 10 partidos ganados, un empate y una derrota, terminando aquí la primera fase victoriosos, llevando a su cuenta 31 puntos, hecho que los convirtió en los líderes del Grupo B.

El rendimiento sustituyó al cansancio en cada entrenamiento y partido y todos los jugadores, alas, pivots, cierres y porteros, desempeñaron el papel exacto, a veces un poco más de lo esperado.

Destacan Julio César Téllez Hernández, joven que terminó como segundo máximo goleador del país en esta fase y primero en el Grupo B, con 15 goles; y Javier Pampin Oriol, refuerzo habanero que nos deja mucho para hablar, poseedor de gran regate y rapidez, quien no solo marca goles, sino que también asiste y defiende.

Andy Pérez, también refuerzo habanero, se ha caracterizado por la dinámica de juego tan original que posee, siendo un jugador del cual nunca te esperas si puede provenir algo positivo o negativo, con siete goles a su cuenta.

Alejandro San Martín Thondike, El Capitán y número 10 del equipo, en el cual todos confían, no importa si se equivoca: es uno de los jugadores con gran experiencia futbolística en el cual nunca pierden la fe, con seis goles.

Ronaldo Bosque, con 5 goles en solo tres partidos, dejó su huella en el poco tiempo que jugó.

Ray William Laty Rodríguez, el más joven del equipo yumurino, solo alcanza dos goles, aunque se espera más de él, por su labor en la preselección del Sub20 pasado, y causa de lesiones no ha podido desenvolverse.

Por parte de los cierres, Maikol Piñera y Cristian Santana, veteranos en el 11 de la primera edición, se agenciaron dos goles cada uno.

El rendimiento poco a poco desde la primera fecha fue aumentando, primero con Cienfuegos, luego con Mayabeque y después con Villa Clara. Algunos partidos se presentaron difíciles, otros se fueron de control pero a simple vista Matanzas estuvo por encima de las expectativas, a pesar de las realidades que una vez vivieron.

Reforzaron su forma física en los entrenamientos en la universidad, la playa y el tabloncillo, hasta los días de gimnasio, sin oportunidad de descanso.

No podemos obviar el hecho de que tras una primera fase difícil y sin descanso viene una segunda aún más fuerte, donde los equipos a enfrentar pertenecen a otro nivel, posicionados entre los mejores del país, y medallistas del fútbol sala; tal es el caso de Ciudad Habana, Industriales y Cienfuegos.

De los nuestros se espera un comportamiento de plantel notable, donde la pelea sea hasta el final y sean cumplidos los sueños de cada uno, tanto para los jugadores como para el colectivo técnico.

La primera jornada de Matanzas será contra La Habana, ganador del campeonato anterior, y a su vez el único equipo occidental, junto a Industriales, al que no han logrado vencer, ni en encuentros amistosos, ni en encuentros oficiales. El reto será tan grande como los deseos de superarse. (Roxana Rodríguez Martínez, estudiante de Periodismo)