Por. Roberto Jesús Hernández Hernández
Matanzas, 2 feb (ACN) Nosotros tenemos conocimiento y voluntad pero estamos limitados, si no existiera el bloqueo contaríamos con todos los recursos para ofrecer una mejor atención a nuestros pacientes infantiles, afirmó Belkis Rodríguez Rodríguez, subdirectora del centro pediátrico provincial.
En declaraciones a la Agencia Cubana de Noticias, la doctora responsabilizó al gobierno de Estados Unidos por imponer a Cuba una política que impide el acceso a equipos e insumos médicos imprescindibles para atender a los menores de edad, especialmente en medio de la pandemia de COVID-19, causada por el coronavirus SARS-CoV-2.
Tenemos que lidiar a diario con la escasez de material gastable como jeringuillas, guantes, trocar, y equipos de drenaje pleural, además de la baja cobertura de antibióticos y otros medicamentos costosos cuya adquisición en el extranjero se le dificulta al país, aseveró.
En el hospital Eliseo Noel Caamaño tuvieron que crecerse ante los obstáculos durante el pico pandémico que sufrió la provincia de Matanzas en el verano del año 2021, el peor rebrote hasta la fecha, cuando la gran cantidad de menores contagiados con el coronavirus requirió habilitar más de 900 camas.
Nuestro equipo sufre el bloqueo (económico, comercial y financiero) todos los días, desde la falta de combustible para los medios de transporte que necesitan para trasladarse, hasta a la hora de realizar exámenes complementarios para un diagnóstico oportuno, pues a veces no contamos con los reactivos y debemos acudir a otro centro, enfatizó la pediatra.
Hoy no disponemos de un tomógrafo, usualmente para acceder a uno recurrimos al hospital provincial comandante Faustino Pérez, pero a veces es necesario ir a La Habana; todas esas limitaciones inciden en la atención al paciente, alargan la estadía hospitalaria y causan inconvenientes a los familiares, denunció.
Con 30 años de graduada y la mitad de ese tiempo vinculada al Eliseo Noel Caamaño, Rodríguez Rodríguez comentó que el recrudecimiento del bloqueo estadounidense afectó la compra de luminarias y otros recursos para dar continuidad a las acciones constructivas en la institución de Salud Pública.
Hoy avanzan los trabajos gracias al apoyo de las autoridades del Partido Comunista de Cuba y el Gobierno, con la participación de entidades estatales que aportan recursos propios y también se suman las micro, pequeñas y medianas empresas privadas, acotó.
En plena pandemia, y pese a la hostilidad de Washington, en el hospital salvaron la vida de un niño de tres años considerado el único caso cubano en edad pediátrica con síndrome inflamatorio multisistémico pos-COVID-19, y también la de una adolescente de 17 años con un grave síndrome hemofagocítico.