En Cárdenas se está desarrollando la aplicación del nasalferón como una acción preventiva en el enfrentamiento a la COVID-19.
El estudio comenzó a finales del pasado mes de enero y está siendo llevada a cabo por la doctora Lizbet León Herrera, especialista en Medicina Interna y coordinadora de dicha investigación en nuestro territorio.
El nasalferón consiste en una formulación de gotas que refuerza el sistema inmunológico del cuerpo humano, específicamente en el área nasofaríngea que según estudios es el área más propensa a su introducción a nuestro organismo.
Cuba comenzó a aplicar desde el 7 de enero el nasalferón a viajeros y sus familiares, fármaco de la industria biotecnológica para evitar la transmisión del SARS-CoV-2, y fortalecer el sistema inmunológico.
Según el informe de investigaciones realizadas por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) para contribuir al control de la epidemia de COVID-19, se demostró que el paso del Interferón a la sangre, detectándose los máximos niveles de concentración a los 30-45 minutos de la administración nasal, evidencia incrementos de los marcadores de respuesta antiviral e inmunitaria innata a nivel de la mucosa orofaríngea y en linfocitos de sangre periférica.
Especialistas aseguran que evita la replicación de la enfermedad y modifica la cantidad de colonias presentes en el organismo.
El medicamento es autoinoculado, se administra una gota en cada orificio nasal dos veces al día por un período de 5 a 10 días, y disminuye la probabilidad del virus de adherirse, replicarse y por tanto de ocasionar la enfermedad.
Dentro de la población seleccionada a la que se le está aplicando el nasalferón se encuentran los viajeros que arriban desde el exterior del país, sus familiares y convivientes del área del biplanta.
(Con información de Salud Cárdenas)