“Hoy nos enfrentamos a la colonización cultural, que es global y que tiene en Cuba un blanco predilecto”, afirmó Rogelio Polanco, jefe del Departamento Ideológico en el Comité Central del Partido, durante su participación en la reunión plenaria de la filial matancera de Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
“Existen ejemplos de que se puede hacer más en medio de las limitaciones y buscar alternativas a los problemas —aseguró el dirigente político—. Este sector tiene potencialidades para generar ingresos que contribuyan a su sostenibilidad, aunque el presupuesto del Estado siempre estará a su disposición, eso se demostró durante la etapa de la pandemia”.
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Recibe nuevos miembros la Uneac matancera
La magna cita anual de los artistas yumurinos se celebró este miércoles 11 de enero y contó con la presencia de Alpidio Alonso, ministro de Cultura; Susely Morfa, primera secretaria del PCC en la provincia; el gobernador Mario Sabines Lorenzo; Marta Bonet de la Cruz, vicepresidenta primera de la Uneac; Indira Fajardo, presidenta del Instituto Cubano de la Música; y otras personalidades.
El encuentro inició con la presentación de un audiovisual que resumió los principales logros y proyectos de la etapa precedente. También hubo un momento para recordar a los miembros que ya no se hallan entre nosotros.
En su disertación, José Manuel Espino, presidente de la Uneac en el territorio, hizo un recuento de las iniciativas emprendidas para mantener vivo el trabajo de la organización durante los momentos más difíciles de la pandemia de covid-19.
“Cuando el presidente de la República, Miguel Díaz-Canel, nos convidaba ‘No dejen morir el Congreso’, comprendimos que representaba un desafío enorme ser parte de la gesta de un país que en gran medida hace su historia desde la cultura. Lejos estábamos de imaginar que seríamos protagonistas del mayor acto creativo de resistencia cultural”.
Entre los éxitos del período, destacó la programación de un amplio espectro de actividades en la Casa Social, la estrecha vinculación con la enseñanza artística, el trabajo de los comités territoriales y el acompañamiento metodológico de las experiencias comunitarias. Además, puntualizó que persisten insatisfacciones como la aún escasa visibilidad del acontecer de la cultura matancera en los medios, el que no se haya logrado implementar la comercialización de obras de las artes plásticas o la falta de sedes propias que hoy padecen algunos grupos emblemáticos.
Después de la presentación del informe, se generó un intenso debate sobre algunas preocupaciones de los afiliados: el pago de la subvención estatal a los músicos, la escasez de opciones culturales en la zona urbana de Varadero, el estado actual de la galería de arte de Jagüey Grande o la crisis del papel que afecta a nuestras editoriales. Muy aplaudidas resultaron las intervenciones de Alfredo Smith Junco, representante de Muñequitos de Matanzas; Luis Llaguno y Loly Márquez, de Nuestra América; el trovador Raúl Torres y el artista de la plástica Luis Felipe Franco.
En sus conclusiones, el ministro de Cultura, Alpidio Alonso, habló sobre la responsabilidad de la cultura en la formación del individuo, especialmente de los más jóvenes, que hoy están expuestos a un bombardeo constante de información foránea de cualquier tipo.
“Debemos comprender que hemos sobrevivido a montones de dificultades y crisis, y todavía podemos reunirnos para hablar de proyectos, de sueños para la vida futura del país y de cómo todos unidos podemos servir más. Ese es el sentido de una organización como esta”.
Al cierre, se entregó la Medalla 50 Aniversario de la Nueva Trova a Luis Llaguno, Loli Márquez, Raúl Torres, José Antonio Mendes Valencia, Reinaldo Montalvo, Vicente Hernández Morejón, entre otros, y el Sello 60 Aniversario de la Uneac a Magali Bernal, Laura Ruiz y Nora Hernández González. (Fotos: Ramón Pacheco Salazar)
