En una sala matancera vestida de recuerdos familiares, entre fotos que evocan las memorias de los seres queridos, imágenes del Comandante Camilo Cienfuegos Gorriarán encuentran espacio en las paredes de la casa de Pablo Ávila Morell, un combatiente que desde los 19 años se sumó a las filas por la lucha de un único ideal: Cuba libre y soberana.