Por primera vez desde el inicio del programa de apoyo comunitario integral en las circunscripciones se escoge una zona rural en el municipio de Colón.
El escenario de las acciones de participación colectiva resultó el batey San Isidro, donde residen más de 300 pobladores y tienen como prioridades e insatisfacciones el cumplimiento del ciclo de abasto de agua y las malas condiciones de los viales, cuestiones planteadas de forma reiteradas al delegado que los representa en la circunscripción 55, Rafael Rivera Morales.
De soluciones relacionadas con disponer del vital liquido, Rivera Morales expresó la posibilidad -cuando las condiciones del territorio lo permitan- del cambio de la turbina por una eléctrica, pues la actual, con roturas frecuentes, es alta consumidora de combustible y lubricantes. Abogó además por una mayor preocupación por parte de los directivos de la Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) Gabriel Valiente, responsables de la tarea.
Otras cuestiones relacionadas con la situación constructiva de las viviendas, la higienización y el acercamiento de servicios vitales a la comunidad, requirieron de atención por los representantes de varios organismos, los que visitaron personas con subsidios de viviendas o con estas en mal estado y ofrecieron asesoría jurídica de diferentes trámites.
Entre las actividades destacaron la feria agropecuaria garantizada con variadas ofertas por parte de la Agricultura y la Empresa municipal de Comercio y Gastronomía, junto a las actividades culturales con artistas profesionales y del movimiento de aficionados.
Comunidades como el batey San Isidro requieren de participación colectiva y apoyo integral como contribución a organizar, promover y dar seguimiento a tareas en bien de los pobladores.
