Los trabajadores de la Empresa Eléctrica de Matanzas, que aportan ayuda solidaria en las provincias damnificadas por el huracán Ian, laboran de forma incesante en el municipio de Consolación del Sur, Pinar del Río, luego de trabajar en La Habana y Artemisa, respectivamente.
El ingeniero Lázaro Peña Gendy, quien se halla ahora al frente del contingente yumurino, declaró a Girón que los 57 obreros del colectivo laboran en los poblados de El Piloto y Puerta Golpe, y que cumplen el principal objetivo de su permanencia en ese territorio, que es restablecer el servicio a la población y demás entidades locales.
Realizan cambios de postes dañados o caídos, reparan las líneas de 33 mil volt y 13 200 volt, cambios de transformadores y llevan energía y luz a los hogares, para lo cual parten a las 7:00 de la mañana al cumplimiento de sus respectivas misiones y regresan más allá e las 9:00 de la noche a la escuela especial en el El Piloto, que les sirve de hospedaje.
“Lo importante es que cada vivienda reciba este bien social, sin que importe las horas y días invertidos para lograrlo. Tenemos las indispensables condiciones de vida, y el descanso necesario para reponer las fuerzas, además de alimentación. Sabíamos a qué nos enfrentaríamos luego del paso del huracán Ian”, aseveró Lázaro.
Sin rasguño alguno en lo personal, al cumplirse las medidas de seguridad ante cada labor cotidiana, emplean los recursos técnicos y materiales adecuados, como carros de servicio, camiones grandes, grúa, cestas, medios manuales, entre otros.
“Hay mucho trabajo, pero eso sí, también entusiasmo y buen estado de ánimo entre los muchachos, quienes avanzan al vencer el reto diario”, manifestó Peña Gendy, director de la Organización Básica Eléctrica del municipio de Matanzas.
POR LA HABANA Y ARTEMISA
Antes de arribar a la provincia más occidental del país, el contingente matancero detuvo su andar en la capital del país y en tierras artemiseñas, también azotadas por el mencionado fenómeno metereológico, explicó el ingeniero Eugenio Suárez Oliva, director Técnico de la referida empresa provincial.
En las habaneras localidades de Vento, El Cacahual y Rincón trabajaron de forma incesante desde bien temprano hasta altas horas de la noche, en el restablecimiento de numerosos circuitos dañados total o parcialmente, así como en la también rehabilitación de otras redes primarias y secundarias, que requirieron de un desempeño muy técnico por las serias averías causadas por Ian.
En Artemisa, el deterioro no fue menor en diversos barrios y localidades, incluida Bahía Honda.
Restablecer el servicio, como se hizo, en dos días, demandó un esfuerzo mayúsculo por parte de todo el contingente, porque incluso las condiciones aledañas a las líneas les eran adversas, por la presencia de árboles caídos, postes partidos, y líneas en el suelo. Pero venció, una vez más, la voluntad y deseo de nuestros valerosos hombres al imponerse a las adversidades, en este caso de la naturaleza.
“Allá están y estarán, alejados de la familia, hijos, esposas, padres, vecinos, amigos, para cumplir esta misión asignada, sobre todo humana, indispensable, sin mirar atrás, cada día más dispuestos, cuidándose, pero con voluntad férrea, en la ayuda solidaria en nombre de todos los matanceros a sus hermanos pinareños, dijo con voz firme el directivo del sector eléctrico, quien estuvo al frente del contingente en sus inicios.
